Otra Mente Brillante Arruinada por la Educación

3 jun 2011

Lunes Observados



Ahí estaba yo en mi casa, muy tranquila, lunes a la noche, lista para irme a dormir, cuando un retortijón me hizo notar que las cosas estaban por cambiar para peor.
Dos horas mas tarde, las comidas de todo el fin de semana habiendo hecho una segunda aparición en el show - ni ellas ni yo contentas de vernos - me encontré en mi cama tiritando de frío al punto de sacudir el colchón.
En otras circunstancias, siendo como es otoño casi invierno, esto podría a pasar como algo normal, pero en este caso, viendo que mi casa es mas bien calentita, nop. Como el calambraje seguía jodiendo, los tiritones no pasaban y la fiebre empezaba a subir, le dije al hombre de mi casa que llamara a los muchachos de la guardia ambulatoria.
Prestos y prontos, llegaron a los veinte minutos, en su ambulancia naranja. Me tomaron la presión, hicieron todo el show, me dijeron que no tenían ni idea - pero con palabras mas largas - y me preguntaron si no prefería ir a la guardia del policlínico. Como preferir lo que se dice preferir, no, pero viendo que así no iba a poder dormir, acepté graciosamente la oferta - o todo lo gracioso que se puede ser doblado en dos - me vestí y me fui a pasear en la ambulancia naranja - no hay nada de emocionante en eso, ni siquiera prendieron la sirena. H se ocupó de dejar a mi suegro con los chicos y me alcanzó cuando ya los muchachos me habían depositado en el consultorio del médico de guardia.

Los tiritones continuaban, los calambres persistían, pero lo que tenía al médico perplejo - todo el resto podía achacarse a una gastroenteritis - era la fiebre, que encantadora ella, seguía trepando. Por si las moscas me hizo una orden de Diclofenax - las inyecciones intramusculares son mas bien jodidas, mas aún a las dos de la mañana - y me mandó a hacerme unas placas al fondo del edificio. H me acompañó y bien que hizo porque estaba yo llegando a la sala de radiografía cuando la fiebre llegó hasta arriba y mi presión se fue al piso, practicamente volteándome a mí en el proceso.
El hombre de mi casa me atajó, me ayudó a ponerme la bata horrible que te hacen ponerte para las radiografías, y entre él que me sostenía levantada y los comentarios alentadores del radiógrafo - "vamos, señora, son sólo dos placas, párese ahí, usted puede", al que yo no tenía fuerzas para cachetear pero ganas no me faltaban - mientras yo me sentía derretir entre el calor espantoso de la fiebre y la necesidad de tirarme al suelo, logré sacarme las fotos internas y, finalmente, ambos sádicos me dejaron desparramarme en la camilla.
De ahí, de vuelta al médico de guardia, que sin tener ni idea a qué se debía la fiebre - que bendita ella había vuelto a bajar, dejando a mi presión subir - decidió dejarme en observación.

Me llevaron entonces hasta una habitación donde no estás ni adentro ni afuera, sos "de paso", donde despertamos a la chica que dormía en la cama de al lado. Me disculpé - porque yo soy muy educada en cualquier circunstancia y la fiebre no quita lo cortés -, me acosté, me pusieron el suero - parece ser que es una condición sin equa non, si querés quedarte, tenés que dejar que te pinchemos -, me sacaron sangre y me dejaron - tratar - de dormir. Algo difícil de hacer, porque tengo que decir que esta gente cuando te dicen que estás en observación, te observan.

Finalmente, entre dormitando y conversando con la chica de la cama de al lado - bronqueolitis, se lo agarró esperando el colectivo a las cuatro de la mañana volviendo de su trabajo limpiando baños, para poder mantener a cuatro críos, que tres son del primer marido que la fajaba y contra el que tuvo que poner una denuncia porque trató de tirarla por la ventana, no, sí a mi siempre me toca la gente con las mejores historias en la cama de al lado - llegó la mañana, horario en el que estaba programada mi ecografía.
El enfermero me dijo entonces que para la eco tenía yo que esperar a que H trajera el papelito que le había dado el médico. H me dijo por SMS que él no tenía ningún papelito. El enfermero me dijo que él lo tenía que tener. H me dijo que a él no le habían dado ningún papelito, que el médico había dicho de palabra y nada mas que a mí me tenían que hacer una eco.

A las diez de la mañana, sin hablar ni con H ni con el enfermero y sin ver ningún papelito, llegó una silla de ruedas a buscarme para ir a hacerme la eco - no si la burocracia... - y me llevaron al segundo piso. La gente te mira pasar con una cara de circunstancias cuando te llevan en silla de ruedas sosteniendo una botella de suero en la mano. Por suerte estaba de jeans, remera y botas, de otra manera me hubiera sentido realmente muy incómoda.

La ecógrafa se ocupó de revisarme órgano por órgano, y como era nueva - bien por mí, andaba de suerte en suerte - se la pasó pidiendo consejo la chica junto a ella, que le daba las indicaciones pertinentes - "si, ahora agrandá eso, ¿ves? tiene xxxxx justo ahí" - por lo que cada dos minutos yo no podía evitar el mirarlas asustada, y ellas se disculpaban y no, todo es normal. Taradas, como para sustos está uno.
La eco dio fabulosamente - tengo los órganos de una persona diez años mas joven - y esperé veinte minutos a que el camillero me viniera a buscar de vuelta, porque no sé que problema había pasado en el quinto piso. Ya estaba yo lista para pararme con mi bolsita de suero e irme empujando la silla de ruedas yo sola cuando finalmente se dignó a aparecer y me llevó de vuelta para abajo.
En mi habitación de paso - ni puerta tenía - me encontré con que venían a darle el alta a mi compañera de cuarto, pero de mí nadie tenía noticias.

H estaba afuera esperando, pero no lo dejaban pasar. Yo ya me sentía bien - no fiebre, no dolores, no tiritones, no nada - y sentada en mi cama, tenía un embole de aquello - no televisor. El enfermero vino a chequear mi suero - que a estas alturas también me tenía re podrida - y me dijo que tenía que esperar a la médica de turno, la doctora Lorena - no es un nombre serio para una doctora -, y que en el interín tenía que llenar un frasquito para el analisis de orina... que en mi opinión podrían haberse acordado antes pero bueh, a estas alturas...
Me ocupé de eso, entregué el frasco, dejaron pasar a H - sigo sin entender porque lo habían demorado, en la habitación de al lado parecía haber una fiesta la cantidad de visitas que rodeaban a esa señora - y apareció finalmente la doctora Lorena - que tendría que empezar a pedir que la llamen por el apellido -, que me dijo que todos los analisis, todas las placas, todas las ecos, habían dado normales y que no tenían ni idea - pero con palabras mas largas. Me recetó un par de remedios para el dolor de panza - que no tomé porque el dolor nunca volvió - me dijo que hiciera dieta - que hice, pero tampoco lo tomé muy en serio porque la nausea y los retortijones nunca volvieron - y me dijo que si volvía sentirme mal volviera a visitarlos - cosa que no hice porque la fiebre nunca volvió. Me dijo que viniera a la tarde a buscar los resultados del último analisis y que se los llevara a mi médico. El enfermero me sacó el suero - no le hizo nada de gracia mi comentario de "¡libérame!", alguna gente no parece tener sentido del humor - y me dejaron partir, con un papelito que me daba derecho a 48 horas de reposo. Parece ser que si no saben la causa de tu malestar sólo tenes derecho a 48 horas, no pidas mas.

H fue al día siguiente a buscar los analisis que quedaban y no se los quisieron dar, le dijeron que quedaban en la expediente del paciente - para qué nos habrá dicho la doctora Lorena que los fuéramos a buscar entonces... debe ser el nombre el problema. El hombre de mi casa está un tanto indignado, frente a esto, le sale el hombre de leyes de adentro y protesta que cualquier estudio que te hagan es propio y privado y uno tiene todo el derecho del mundo de llevárselo a donde uno quiera. Pero la verdad, me ne frega, no pienso volver al policlínico, así que se lo pueden quedar con mis bendiciones.
Y he ahí el por qué de mi deserción del blog en los últimos días.
Sólo tenía 48 horas de reposo, así que me las tomé en serio y reposé.

PD: Para los parientes que leen esto, no teman, ya saqué turno con los diferentes médicos para hacerme mas analisis así cuando me digan que no tienen ni idea - con palabras mas largas - por lo menos me lo dice alguien mas calificado que la doctora Lorena - ese nombre... ese nombre...

10 comentarios:

eMe dijo...

Cómo me gusta leerte!!! Primero, me alegro de que no haya sido más que un sustito; Segundo, me alegro de que hayas disfrutado tus 48 horas; Tercero, sí, es necesario... que alguien le avise a la Dra. Lorena que nadie va a respetarla si sigue siendo la Dra. Lorena.
Y que ni se le ocurra pasar a ser la Dra. Lore porque ahí sí, es el acabóse!!!

=)

El Gaucho Santillán dijo...

Bueno, la cuestiòn es que estes bien.

Lo demàs se arregla.

Un abrazo.

GABU dijo...

Pobre piba!!!!

'LORENA' con ese nombre poco serio no le veo un futuro brillante y eso ya quedó bastante demostrado al menos,no???

P.D.:Hoy en día a uno le agarra un 'patatús' a nadieS sabe ni de dónde vino,ni el porque,ahora los tipos SIEMPRE tienen a flor de labios el pedorro argumento del stress o el consabido virus choto... ¬¬

BESITOS INTENSIVOS ;)

zorgin dijo...

lorena... renal o...
quién le dice, por ahí es una señal...

a todo esto, quién es el padre del cuarto hijo de la señora de junto, la que limpia baños para mantener a todo el mundo? porque si el primero lo tenía que mantener a raya al segundo brishaba por su ausencia.

detalhes.
los lunes son jodidos.

Sir Lothar Mambetta dijo...

Pensemos en otras posibilidades:

-El puesto es suyo con una condición, doctora.
-Sí, dígame.
-Que utilice su nombre de pila.
-Pero nadie me va a respetar si me llaman "Dra. Lorena".
-Creo preferible la falta de respeto a lo que pueda causar su apellido, Dra. Sacrificiohumano.

Un beso.

Dany dijo...

En la línea del amigo Sir Lothar me cabe pensar de que se trata de la Dra. Lorena Pcystzm. Si la orina es de uno los análisis de esa orina le pertenecen a ese uno.
Un beso.

Yoni Bigud dijo...

Cómo odio a esa gente que hace las ecos. Vea, una vez estaba yo haciéndome una eco medio urgente, por un problema que es mejor olvidar en un órgano que no deseo mencionar. Ahórrese las preguntas. El caso es que la señorita miraba la pantalla con suma atención, y un compañero repasaba desde un plano más apartado. De pronto volvió el rostro hacia mí, y con cara de preocupación me dijo lo siguiente: '¿tenés antecedentes familiares de alguna enfermedad?'

Me alegro que todo haya ido bien para usté. Y, desde ya, suscribo todas sus quejas.

Un saludo.

Damaduende dijo...

Me gusta que me leas, eMe! :)
Parece ser que fue un susto nomás. Y admito que las segundas 24 no las disfruté mucho porque me agarró una jaqueca por haber dormido de mas que... :S
Y sí, tiene que empezar a hacerse llamar por el apellido, así no da.
Besos


Por el momento, Gaucho, todo parece estar bien.
Le diré que durante mi imitación de marioneta sin hilos de la sala de rayos por un momento pensé que todo iba a estar mal, pero repuntamos.
El resto, lo atamos con alambre.
Besos


NO era sólo el nombre, Gabu, el aspecto era poco serio. Pero bueno, hay que darle tiempo, estaba haciendo la residencia y todo eso. Tal vez mas adelante note que no hay futuro en ser la Doctora Lore.
Eso!! Trataron de hacerme creer que era stress, pero se los negué de plano. Estressada yo? Dónde? Además, si fuera por stress mi problema sería que se me caería la cabeza, cargo todo en las cervicales :S
Besos besos

Damaduende dijo...

El doctor de la guardia - campera, manos en los bolsillos - trató de hacerme creer que era renal en un momento... No le creí.
Tal vez eso sea una señañ también.
El padre del cuarto hijo de la señora que limpia los baños del casino parece ser que cuida el puestito que tienen en el bajo. No, mejor deje de preguntar Don Zor...
Los lunes son jodidos, sí.
Por suerte es viernes.


SirM, mucha gente confunde el respeto con el miedo... La Dra Sacrificiohumano podría, ya que no va a conseguir uno, avanzar sobre el otro...
Besos


Es lo que yo digo, Dany! La orina es mía, por qué los analisis no?! Pero vaya uno a discutir con un burócrata sin una carta documento...
No, creo que tenía un apellido simple, no de los checos y las consonantes extra... DEje ver, tengo la orden... Rua. Doctora Rua... Suena mucho mejor que Doctora Lorena, no sé en que está pensando esa chica.
Besos

Damaduende dijo...

Vio, Sr Bigud?! Y después pretenden que uno se quede acostado tan tranquilo, mientras ellos hacen toda serie de ruidos y preguntas alarmantes "Uy... y viste esto?! Miraaa... Nooo, que bar- y esto de acà?! Sí, justo acá. Uh, y la forma?"
Para estirarme y pellizcarle el brazo me daba justo :/
Gracias por su apoyo.
Besos